La Representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Verónica Guerrero, destaca en un artículo de opinión la importancia que tienen las TIC dentro de los sistemas productivos sostenibles y cómo Nicaragua está dando pasos sólidos para implementarlas.

A continuación el artículo:

 A finales de 2016 el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional (GRUN) dio a conocer las orientaciones generales de la acción gubernamental en su alocución ¡Con un pedazo de Cielo! 2017: Un año para afianzar victorias; en el cual las soluciones imaginativas y creativas para propiciar las mejores condiciones en la lucha contra la pobreza y la creación de más y mejores oportunidades para aprender, emprender, trabajar y prosperar, se vislumbraban como metas a alcanzar.

El llamado era a asumir el mandato de eficiencia y eficacia en el trabajo institucional para responder a las prioridades de la población, entre ellas, la de avanzar en aspectos como la conectividad, la comunicación, y las tecnologías de información, aspectos que ya exhiben notables avances, especialmente en la promoción y uso de las TIC en los programas socio-productivos, acercando la economía familiar a las instituciones, el conocimiento, las tecnologías, los mercados y los servicios, de forma más rápida y a un menor costo de operación.

Aun cuando todavía las TIC suponen un gran reto para nuestras naciones latinoamericanas en términos de acceso, conectividad e infraestructura, nadie duda del papel de las TIC como herramienta para apalancar el desarrollo sostenible (meta 9.C del ODS 9 de la Agenda 2030), y con éste la generación de sistemas alimentarios inclusivos y sostenibles para alcanzar el Hambre Cero (ODS 2). 
El uso de las TIC en el campo agropecuario ya tiene un largo camino recorrido. Tanto la radio, que sigue teniendo mayor penetración en las zonas rurales y periurbanas, como la televisión, han permitido la transferencia de información para el desarrollo rural a las familias campesinas desde hace décadas. Las nuevas TIC, entre ellas los computadores y redes, el internet, la tecnología de comunicación inalámbrica, los sistemas de teledetección, información geográfica y GPS, entre otras, han abierto una nueva era en el uso de estas tecnologías para el desarrollo agrícola integral. 
Su potencial es enorme ya que permiten generar e integrar información oportuna para las familias y las instituciones en tiempo casi real sobre precios de mercado, incidencia de plagas y enfermedades, condiciones agroclimáticas, previsión de cosechas, tecnologías, uso adecuado de insumos, entre otros. Algunos de los efectos positivos de su uso combinado en las estrategias institucionales pueden ser el aumento de los ingresos ante mejores precios de venta, la reducción de pérdidas por condiciones agroclimáticas adversas, y la acción temprana ante la presencia de plagas y enfermedades en los cultivos.

Es así como en Nicaragua el Instituto de Protección y Sanidad Agropecuaria de Nicaragua (IPSA) emprendió un intenso proceso de consolidación y fortalecimiento institucional que incluyó el desarrollo de sus sistemas de gestión en línea y sus sistemas de vigilancia fito zoosanitaria, aprovechando las nuevas TIC.

Desde el 2014 el país inició la implementación del Sistema de Alerta Temprana del Café (SAT-Café, desarrollado inicialmente por la FAO para dar seguimiento a la roya del cafeto), extendiendo su acción a otras plagas que afectan este cultivo. La herramienta permitió un salto de calidad y cobertura en el sistema de vigilancia, pues no solo permitió obtener indicadores de incidencia de plagas y enfermedades en tiempo real, sino que también mejoró la representatividad y la confiabilidad de los datos.

La experiencia exitosa de SAT-Café impulsó al IPSA a desarrollar otros SAT para cultivos de interés durante el 2016 y 2017, entre ellos el SAT Cacao y más recientemente el TICSAN para el área animal desarrollado con el apoyo de FAO, fortaleciendo así sus sistemas de vigilancia sanitaria. Adicionalmente el IPSA ya cuenta con un sistema de Registro Único de Fincas (RUF), un Sistema de Trazabilidad, y un Sistema de Gestión de la Información que actualmente trabaja en la comunicación e interoperabilidad de todos los otros sistemas para generar información georreferenciada integrada.

Nicaragua ha sido también el primer país de la región centroamericana en calibrar y adaptar el Sistema del Índice de Estrés Agrícola (ASIS), una herramienta desarrollada por la FAO para la teledetección de las zonas agrícolas afectadas por sequía. Con la creación de la Unidad de Análisis Agroclimático en el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (INETER) y la calibración de ASIS, se están generando boletines agrometeorológicos disponibles en su página web, que permiten a las autoridades, tomadores de decisión y a las familias productoras, acceder a información útil y oportuna sobre las condiciones agroclimáticas para la planificación y/o atención de los ciclos de siembra y cosecha.

Es por estos notables avances que los países de Centroamérica han confiado al INETER ser el administrador técnico del Sistema Subregional de Vigilancia de la sequía agrícola. 
También el INTA ha fortalecido sus capacidades en Comunicación para el Desarrollo (CpD) y en el uso de TIC. Actualmente esta institución cuenta con una página web que se ha optimizado para la transferencia de información útil al productor, su familia y a la población en general, y ha mejorado la calidad y la frecuencia de la programación de la revista televisiva Culturagro, incorporando aspectos de producción pedagógica audiovisual y mejor tratamiento, enfoque y devolución de la información producida y orientada a la agricultura familiar.

Por su parte, el Modelo de Innovación Participativa que promueve el INTA cuenta además con un amplio enfoque que fortalece el uso de la comunicación para el desarrollo y las TIC para la trasferencia y divulgación de tecnologías al productor y su familia, trabajando actualmente en el desarrollo de aplicaciones móviles para compartir información con los y las protagonistas.
Los avances en el uso y difusión de las TIC para el desarrollo agrícola son notorios, pero aún quedan muchas áreas por desarrollar que representan una oportunidad en la mejora de la calidad de vida de las familias productoras y la dinamización de las economías locales. Aplicaciones sobre precios e información de mercados con plataformas para el intercambio y la negociación son un ejemplo de ello.

En la medida en que las TIC fomenten una cultura para el intercambio de información útil, de doble vía, práctica y con capacidad de adaptarse a los entornos locales, podremos hacerle frente a la fragmentación que afecta a la agricultura familiar. Por supuesto, fortalecer la alianza público-privada para mejorar el acceso y el alcance a ellas será vital para alcanzar la meta.

 

* Verónica V Guerrero R
Representante de la FAO en Nicaragua desde agosto de 2015.
Socióloga (UCV, Caracas), Magíster en Investigación, Gestión y Desarrollo Local (UCM, Madrid).

Fuente: El 19 digital